Cristina Coello. Quito
Debido al gran aumento de alteraciones tiroideas reportadas en el Ecuador era necesario y urgente estandarizar los criterios para su diagnóstico y tratamiento.

De allí que un equipo de profesionales de la red pública y privada han elaborado la primera ‘Guía de Práctica Clínica de nódulo tiroideo y cáncer diferenciado de tiroides: diagnóstico, tratamiento y seguimiento’ (Aquí el documento), que ya ha sido publicada por el Ministerio de Salud Pública (MSP) en el Registro Oficial.

Christian García, cirujano de Cabeza y Cuello del Hospital Eugenio Espejo y parte del equipo de autores, ha señalado a EDICIÓN MÉDICA que la elevada incidencia de nódulos tiroideos requería un documento “muy amigable, fácil de entender” y que facilite la interpretación “de forma apropiada” de la patología.

Este tipo de nódulos generalmente son identificados en el primer y segundo niveles de atención pero se ha estimado que existe un diagnostico “por el uso rutinario de la ecografía”, ha detallado otra de las autoras, Verónica Rosado, endocrinóloga del Hospital Vozandes.

Para esta especialista, la nueva guía contiene los criterios de las diferentes sociedades científicas que permitirá a los profesionales de la salud “establecer un adecuado estudio de un nódulo tiroideo sin subestimar los que sí tienen importancia”.

Rosado ha destacado que la guía permite “hacer el abordaje en la atención primaria de un nódulo” y detalla el procedimiento para transmitir adecuadamente la información al paciente.

Otro de los autores y cirujano oncólogo de la Sociedad de Lucha contra el Cáncer (SOLCA). Carlos Torres, ha insistido que se trata de un documento “versátil, fácil, accesible a los profesionales tanto médicos generales y especialistas”.

Torres también ha recalcado en la necesidad de normatizar el manejo del nódulo y cáncer de tiroides “en todas las instancias de los diferentes niveles de complejidad del país”.

El cirujano ha puntualizado que el nódulo tiroideo, como el cáncer de tiroides se ha incrementado en todo el mundo y según el registro nacional de tumores de SOLCA, su incidencia ha crecido de 3 a 4 veces estas últimas tres décadas.

“De allí la importancia de hacer la guía, porque con el advenimiento de la tecnología comenzaron a diagnosticarse nódulos que en su mayoría no deben ser tratados quirúrgicamente. Solo un 5 al 15 por ciento son cáncer. El resto son benignos que deben ser tratados conservadoramente o con seguimiento”, ha insistido Torres.

También ha participado en esta guía Fernando Yerovi, médico nuclear, quien ha detallado que una parte en el tratamiento de cáncer de tiroides es el yodo radioactivo. “Era necesario establecer estándares en la cantidad que debe recibir un paciente, de acuerdo al grado histopatológico el momento de la cirugía y, además, determinar cómo administrarse” esa terapia.

“Esperamos haber subsanado muchos interrogantes que existían al respecto y que la guía sea una buena herramienta para todo médico. Aquí están bastantes lineamientos sobre lo que hay que hacer cuando se tiene un paciente con nódulo tiroideo, qué exámenes pedir, etc. Es útil desde el primer al tercer nivel”, ha dicho.

Finalmente, García ha añadido que el cáncer de tiroides puede ser tratado de forma convencional (cirugía, uso de yodoterapia) en el mayor porcentaje de pacientes (99 por ciento), pero existen casos excepcionales que requieren otro tipo de drogas y esta guía incluye una opción terapéutica para los categorizados como yodorefractarios.

El especialista de cabeza y cuello ha aclarado que el análisis de medicamentos especiales “siempre serán valorados por un equipo multidisciplinario”.

El dato

En 1999 la Sociedad Ecuatoriana de Endocrinología publicó las ‘Recomendaciones de Consenso para Ecuador sobre el Diagnóstico y Manejo Básico del Nódulo y Cáncer de Tiroides’. Posteriormente, SOLCA también elaboró un protocolo para estas patologías.